Hasta pronto

Hoy quería hablarte de la amistad, no porque sea el cumpleaños de uno de mis mejores amigos. O porque la persona que me interesa me preguntó si estaba bien o porque quedan pocos días para despedirme de mi compañera de viaje, de aventuras, de juergas, de trabajo, de ocio; la compañera de uno de los mejores momentos de mi vida. Más bien, por que hoy, al lado de mi hermano entendí que una amistad no se compra, sino se cultiva, es un proceso de conocerse y de compartir momentos, sean estos gratos o no tan gratos. No es ese te doy lo que quieras, escoge nomás. Es más que interés cuantitativo. Es entender, escuchar, comprender, educar, ayudar, etc. Saber que cuentas con alguien, tanto para reír como para ahogar tus penas; es un apoyo desinteresado que nos recompensa con un “gracias”, o simplemente saber que la otra persona es feliz.

Cultiva tu amistad con acciones que los lleven a mejorar a cada uno, compartan momentos que los lleven a conocerse mejor y sobre todo aceptar a tus amigos con sus virtudes y defectos, aceptarlas como son. La amistad no obliga, ella comprende y respeta tus decisiones. Ahora entiendo y me siento tranquilo ya que te vas.

Si no vuelvo, que la deriva nos vuelva a juntar en algún sitio, el último que nos hubiésemos imaginado.

Art Rock 28.04.05